lunes, 16 de mayo de 2011

Necesidad absoluta



Momentos en el recuerdo, allí se quedaran, situaciones que jamás se volverán a vivir, recuerdos, solo recuerdos.
Nostalgia de un pasado que ya no existe y que huellas imborrables ha dejado.
Momentos sin desperdicio, momentos de dulzura y cariño que hoy dejan un gran vacío por la perdida del ser mas amado.
Ahora el recuerdo es inalcanzable pero antes era lo mas cercano que yo tenia. Era el amor incondicional en persona, ahora es un recuerdo profundo, ahora es una despedida constante. Ahora es un manojo de vida guardado en mi memoria.
Tengo una necesidad absoluta de la persona que ya no esta, que en el cielo permanece protegiendo mi camino, iluminando mi oscuridad, salvándome de mi misma día tras día.
Un grito desesperado en se ahoga, en mi interior la pena abunda aunque una sonrisa los espectadores de esta gran obra pueden observar.
Bocanadas de inspiración llenan la hoja, susurros del inconsciente que por momentos parece mas conciente que nunca.






BRENDA SEIGUER

martes, 10 de mayo de 2011

El pañuelo



Yo sabia que algún día volverías, yo sabia que algún día admitirías que te importaba, no me quedaba otra cosa que esperar y así sucedió.
El tiempo supo curar mi herida, hasta hace poco sangraba por tu partida, ahora se que si vuelves mi puerta no estará abierta para ti.
Poco a poco fui entendiendo, las lagrimas fueron cayendo; el pañuelo seco las gotas del mar profundo que llevaba adentro.
Ahora sabes que has hecho mal en aparentar no sufrir por ese amor que en algún momento nos unió y cuando te diste cuenta ya fue demasiado tarde.
Sabes que yo te quise como a nadie y que nadie te va a querer como yo lo hice. Ahora la vida se te vuelve una inmundicia porque estas acorralado entre hojas de rencor, sin perdón alguno que calme tu dolor. No puedes perdonarte.
Yo te perdono por hundirme en una locura de amor, por arrastrarme a la desolación, por no curarme las heridas y por darme la espalda cuando mas lo necesitaba, te perdono porque el pañuelo seco las lagrimas de odio que en mi habitaban y las transformo en amor hacia la vida.
El aire que tu respiras yo ya lo respire, no podrás volver a mi aunque sea lo que mas desees, ahora eres tu el que quiere estar conmigo pero yo ya dije basta y aquí estoy escribiéndote la carta del adiós.

BRENDA SEIGUER