viernes, 14 de octubre de 2011

Ponte en tus zapatos.



Haz de cuenta que estas solo, que nadie vendrá a ayudarte. Haz de cuenta que estas en pleno desierto y no tienes agua, tampoco comida y sigues estando solo.
No puedes pretender que nadie venga a ayudarte, no puedes esperar nada de los demás, no puedes depender de los demás en esas circunstancias.
Eres tu solo el que hallara los medios para encontrar el agua que necesitas en pleno desierto y solo tu podrás encontrar el alimento que te nutra.
No puedes depender de los sentimientos de los demás y menos de su ayuda.
Nadie tiene tus pies por lo tanto ponte en tus zapatos y camina tu camino haciéndote cargo de todo.
La vida te dará sorpresas y pondrá en tu camino gente que quiera ayudarte y que te entregara su cariño y tu puedes ofrecerlo también pero no lo hagas esperando algo a cambio; no hagas un trueque de sentimientos y acciones.
Ponte en movimiento, el tiempo corre, las oportunidades pasan y no puedes perderte en la indecisión.
Siempre con la frente en alto y nunca mirando hacia atrás; el pasado ya no existe.
Los errores cometidos deben ser vistos como un aprendizaje y no te reproches nada porque lo que necesitas son soluciones y no depresiones.












BRENDA SEIGUER

lunes, 3 de octubre de 2011

Un beso robado a medianoche

Bajo la inmensidad del cielo, un fuego resplandeciente comienza a prenderse.
Ventanas iluminadas que se apagan poco a poco, la noche es testigo de este sentimiento desproporcionado, las estrellas escondida brillan detrás de la luna ausente.
Luces que encandilan a lo lejos, pasan rápido y de pronto me hablas. El olor a tabaco saliendo de tu boca me envuelve con palabras dulces y el viento las desparrama sin sentido.
Ya no hay salida, estoy presa de este instante que tan detalladamente debiste haber planificado y yo sin verlo venir.
Un beso robado a medianoche provoco un eclipse de emociones, desde ese momento ya no somos los mismos, de aquí en mas el camino será distinto.
Hoy me río al recordar que te he echado pero que siempre vuelves por mi. Ahora estas aquí y ya no puedes irte, ya eres parte de mi aunque no quiera aceptarlo.




BRENDA SEIGUER